El tenis suele ser un deporte con idas y vueltas donde un día te encontras en la cima y al otro te ves en la ruina deportiva. Algo de todo esto le sucedió a Paula Ormaechea una de las mayores promesas que supo tener el tenis femenino en nuestro país.
Raqueta número 1 de la Argentina en varias ediciones de la Fed Cup y además llegó a posicionarse entre las 60 mejores del mundo (alcanzó el puesto 59° en Octubre de 2013).
El año 2018 encontró a Paula en el puesto 650° del ranking WTA pero con una escalada magnífica logró subir más de 400 lugares en el escalafón mundial hasta alcanzar la posición 238°.
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Todo esto se debe a que se consagró campeona en el ITF 25K de Hungría y fue finalista en Zagreb (Croacia) y en Colina (Chile) en torneos de 60K . Para coronar este gran 2018, se dio su ingreso a la clasificación del Australian Open, primer GS de la temporada 2019, luego de 3 años cuando su última participación en un Mayor había sido en Roland Garros 2015 donde alcanzó la tercera ronda (mejor resultado en un torneo GS).
Sus reiteradas lesiones en la muñeca izquierda (que casi la aleja de la actividad profesional) coincidieron con su considerable baja de rendimiento y de rango.
La tenista sunchalense publicó en sus redes sociales la felicidad por volver a encontrarse en la elite del tenis mundial, que a sus 26 años, busca resurgir su carrera y al tenis femenino argentino.-
Y un dia volviste a aparecer en la lista de un Grand Slam. El camino fue muy duro, dolio mucho, pero ahi esta… un empujoncito y entramos ???????????????? pic.twitter.com/zeLWy7rpRg
— Paula Ormaechea (@paula_ormaechea) 18 de diciembre de 2018