Djokovic lo hizo por quinta vez

No fue electrizante, pero si emotiva la final del Australian Open, entre Novak Djokovic y Andy Murray esta madrugada. En un match con vaivenes de ambos lados, Djokovic sumó su quinto GS en Melbourne, siendo el mas ganador del torneo desde la era abierta, y cosechó su octavo Major en su carrera personal.

Ocurre que Novak Djokovic se reinventa todos los años y por eso sigue siendo el número uno del mundo. Nuevamente venció al escocés Andy Murray por 7-6 (5), 6-7 (4), 6-3 y 6-0. Lo hizo cuando el panorama no era el mejor: su rival jugaba mejor y sacaba con ventaja en sets iguales. pero nunca, hay que darlo por muerto al serbio.

El número uno del mundo se impuso en un muy parejo primer parcial, cerrado y con quiebres y contraquiebres de ambos. Lo ganó en el tie break, por 7-5, tras dos errores no forzados de Murray de manera consecutiva. El británico no supo aprovechar una ventaja de 4-2 que tenía antes de cambiar de lado en el desempate. Había golpeado primero Nole.

Sin embargo, en el segundo set, Murray se puso rápidamente 2-0 quebrando el saque del hombre que ya había conquistado este certamen en cuatro ocasiones, pero en el tercer juego no supo sostener el quiebre y Djokovic se lo dio vuelta: le quebró el servicio en dos ocasiones y pasó al frente en el marcador. Volvían los vaivenes al partido.

"No tuve calambres ni pedí asistencia médica porque no había razón de hacerlo. Me sentía débil. Fue una crísis física de 20 minutos. Sinceramente, no lo sentí tantas veces en mi carrera. Yo no quiero abandonar ni darme por vencido, a pesar de estar así pensaba que iba a conseguir la fuerza necesaria. Comencé a golpear más la bola, a jugar puntos más cortos y me permití volver al partido", explicó el campeón en la conferencia posterior.

Tras un incidente en el que dos intrusos saltaron a la cancha y obligaron a parar el tenis por unos minutos, ese parate le vino mejor al escocés, que recuperó el break en su contra y logró llevar el trámite a otro desempate. Allí, Murray se impuso por 7-4, completando ya dos horas y media de juego. Con todo nivelado, aseguraban ambos al menos un cuarto set.

Pero Djokovic no parecía el mismo. Se lo veía cansado y Murray tomaba rápida ventaja también en el tercer parcial. El sexto preclasificado sacaba 4-3 a su favor, y daba señales de que el trámite pasaba a su lado. Pero no, nada de eso. Nole, quien recurrió a su "pulmón extra" ya no le dio chances a Murray, que allí si, pareció sentir el golpe.

"Tuve una crisis en el tercero, estaba muy cansado y sólo necesitaba un poco de tiempo para recargarme y volver a la pista. Después de eso sentí un gran alivio, el impulso quedó de mi lado. En este nivel pocos puntos pueden cambiar las cosas en la cancha", señaló.

Luego, Djokovic ganó tres games consecutivos, se llevó el tercer set por 6-3 y frustró aún más a Murray tras barrerlo por un contundente 6-0 en el cuarto. Así, conquistó su quinto Abierto de Australia, el cuarto en las últimas cinco ediciones del torneo.

"Cada victoria en Grand Slam es especial a su manera. Realmente no las puedo comparar. Pero este torneo por el momento ha sido el de mayor éxito de mi carrera. Me gusta jugar aquí, disfruto venir" concluyó .-