Copa DAVID

David Nalbandian es una rara avis, definitivamente. Es de esos tipos que causan sensaciones encontradas, antipatía a veces, y euforia en las mas. Pero en esta oportunidad su locura criticada la semana anterior por algunos, terminó de darle la razón. Su viaje no fué en vano y con su aparición en el quinto punto de la serie, definió el match y de esta manera Argentina se olvidó del repechaje tan cercano en la previa, y sacó pasajes para julio en Moscú ante Davydenko y cia. También se aseguró seguir en el Grupo Mundial y seguir siendo cabeza de serie en el sorteo de 2011.

El unquillense, llegado hace 72 hrs. a Estocolmo, se unió al grupo de Tito Vazquez y se metió en la competición el Sábado en compañía de Horacio Zeballos para darle el oxígeno necesario al equipo y llegar al Domingo con posibilidades.

Tras la buena actuación de Leo Mayer el Viernes, hoy el correntino no pudo repetir, pero de ninguna manera se desdibujó su actuación en esta serie. Eso si, obligó a arriesgar a Nalbandian frente a Andreas Viciguerra en el quinto y decisivo punto de la serie, que era el billete para Moscú en cuartos de final. Fué un marcador de 7-5 6-3 4-6 y 6-4 tras 2 horas y 35 minutos de juego. 

Cuatro sets para la victoria

Tomas Enqvist determinó que Andreas Vinciguerra fuera quien terminara la serie para Suecia. Pensó que la mayor velocidad de piernas calculando hacerle un partido largo a David, podía ser vital para estirar el match, y ganarle por cansancio al argentino disminuido fisicamente. El comienzo confirmaba el presagio, tiros profundos y mucha actitud para hacer largo el trajin, mostraba a un sueco, sin antecedentes buenos en la Davis para su país, que intentaba aplicar al pie de la letra su libreto.

Un rápido quiebre en el tercer game pareció un llamado de atención para el cordobés, que estaba entrando en ritmo. Pacientememnte esperó el desarrollo, que mostraba a Vinciguerra movedizo, seguro en su juego y acertado en su saque. hasta que en el octavo game se puso 4-4 y empezó a trabajarlo para correrle la pelota. Las devoluciones entraban mejor, y su revés cruzado lastimada a destajo. En el undécimo game Nalbandian gana el suyo en cero, para repetir quebrando en el siguiente y cerrar 7-5. Las cosas en su lugar. La jerarquía se empezó a notar y hasta allí no había signos de molestias en el juego.

Sin embargo en el cambio de set una seña a su kinesiólogo Diego Rodríguez dió muestras de alguna preocupación, que no pasó de allí. Sólo algún dolor manejable y nada que pusiera en peligro su continuidad en el partido. También nos enteramos que los isquiotibiales de su pierna izquierda habían amanecido algo doloridos, pero lo pudieron solucionar y arriesgaron igualmente.

David arrancó el segundo con seguridad y el saque ya pareció menos impreciso, pero con un desarrollo parejo. Ya no estaba tan suelto y guerrero Vinciguerra, y allí empezó a regular el partido Nalbandian. Y comenzó a hacerle lo que le querían hacer a él. Lo empezó a mover, haciendo parabrisas cada vez que podía, pero siempre midiendo sus movimientos, eso si era evidente. Pocas veces una serie fué tan dramática como ésta, con todos lo condimentos que hubo, y con Nalbandian en condiciones cercana a la cornisa con su humanidad tocada y mas delgada. El trámite siguó igual hasta que en el octavo quebró otra vez en cero y cerró 6-3 el segundo.

A Vinciguerra le quedaba unicamente la chance que quemar las naves, y sacar en el partido todo lo que nunca ha hecho en su carrera. Un pozo, quizás de continuidad y esfuerzo que empezó a sentir levemente, mostraba a David algo mas estático. Vinciguerra tiró dos o tres pelotas que entraron y se la creyó. Se envalentonó sacando pecho y en el final del set, cuando pensabamos que trataría de dar el golpe de gracia Nalbandian, apareció en el décimo el sueco haciendo fuerza. El mas largo del partido y tras dos chances de set en la tercera, tras un error no forzado de David, el local se anotó el set. ¿Y ahora?

La pregunta encerraba la incertidumbre por el físico de David. Llevar a un cuarto set obligado no daba garantía que se llegara a un quinto y en que condiciones. Por el contrario, ambos empezaron a hacer mas corto el trámite, y siguieron parejos hasta ponerse arriba en el marcador 2-1 tras vulnerar el servicio de Vinciguerra. Solo restaba imaginar que mantuviera su servicio y ver que reacción podría ofrecer el sueco. Nada de eso ocurrió en el local, apenas un poco mas de trajín para justificar, y llegar hasta la definición en el décimo y sellar 6-4 el partido y la serie.

Ahora habrá que pensar en Rusia, del 9 al 11 de Julio (después de Wimbledon) en Moscú, dónde el equipo de Tarpishev no pierde desde hace 16 años. pero que habrá que saber que los locales no tienen mas a Safín, y si cuentan con Davydenko, Youzhny, Tursunov, Kunitsyn, y Andreev. Material tienen, pero si se cuenta con Nalbandian en forma, Del Potro, Mayer, Zeballos y Mónaco, las expectativas son grandes.

Hoy hay que festejar, disfrutar esta serie que arrancaba con serias posibilidades de estar en Parque Roca en Setiembre, y que ahora abre un escenario distinto, del que nadie pensaba tan solo hace una semana atrás.

¿Una semana dije ?, perdón, tan solo tres días nada más .-

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