Y hubo una gran sorpresa en la final femenina en Melbourne este año. Batacazo, baldazo de agua fría, llamelo como quiera. Lo cierto es que a veces el tenis como otros deportes, deparan este tipo de noticias. Y causan el agrado de todos por cierto, para ponerle algo de impronta a un a veces, tenis tan previsible.
La alemana Angelique Kerber se consagró campeona del Australian Open al batir en la final por 6-4, 3-6 y 6-4 nada mas y nada menos que a la estadounidense Serena Williams, número uno del mundo y máxima favorita de certamen, y conquistó así el primer Grand Slam de su carrera.
Kerber mostró una templanza y concentración envidiable, ademas de una entrega encomiable ante Williams (dosis perefecta este sábado) y asi llevarse el primer torneo grande de su vida y convertirse en la primera alemana en lograrlo desde que Steffi Graf hiciera en Roland Garros 1999. Doblete.
Kerber impidió que Serena conquistara su 22° certamen de Grand Slam, récord que todavía mantiene Graf en la Era Abierta.
Errática, con una imagen diferente a la habitual, Serena simpre fue de atrás en el trámite y desde el inicio. Entregó dos quiebres pudiendo facturar uno solo de Kerber, lo que no le alcanzó para imponer su ritmo habitual. Kerber no perdonó y logró llevarse el primer en 40 minutos por 6-3.
Pero en el segundo, volvió Serena. Pero también se cayó Kerber. La morena se metio de vuelta y encaminó un set a su batuta, aprovechó el bajón de la alemana que cedió su saque con dos dobles faltas, las que luego le iban a costar caro, ya que la líder WTA no iba a aflojar y con la confianza de su lado, plasmó un 6-3 para su cosecha, igualar el match y llegar al tercero definitivo.
Serena Williams había ganado sus ultimas ocho finales de GS. Su última derrota fue en la final del US Open 2011
Y ese parcial resultó infartante, con quiebres de ambos lados en momentos cruciales. Kerber quebró en el segundo game y el sexto (el mas largo y de 10 minutos) donde paso de todo. Tras su saque estiro a 5-2 y había que aguardar la reacción de Serena.
Y otra vez apareció en toda su dimensión, y hasta para quebrarle a la alemana en el noveno y su servicio para seguir con vida. Y allí los nervios de la número uno mas la templanza de su ahora escolta hicieron el resto. Nuevo quiebre y victoria de la alemana que sumó su primer GS y será tapa de todas las portadas este fin de semana.
El resumen de la final entre Kerber y Serena