De la alegría desmesurada y sorprendente de ayer, a la incertidumbre y cara de duda de hoy. La dupla argentina integrada por Juan Ignacio Chela y Pico Mónaco fueron superados ampliamente por los serbios Nenad Zimonjic y Viktor Troicky por 7-6 (4); 6-4 y 6-2 y los locales lograron descontar y dejar la serie 1-2 por las semifinales de esta Copa Davis.
La expectativa estaba rodeada de ansiedad y nerviosismo. Desde el túnel que separa los vestuarios del court principal del Belgrado Arena ya los jugadores argentinos recorrían el camino con caras de serios pero confiados a la vez. Hoy iba a ser el día en que Argentina se clasifique a una nueva final de Copa Davis. Pero enfrente estaba el número 3° del mundo en dobles. Ni más, ni menos.
Con esta premisa, Zimonjic no dejo escapar la chance y se lució en un gran partido junto a su compatriota Viktor Troicky y estiraron la serie para que mañana se vean las caras ¿Djokovic? y Del Potro; y de ser necesario, Nalbandian con Tipsarevic.
El partido arrancó muy parejo, con el saque de Nenad Zimonjic, numero 3° del mundo en la modalidad de dobles. Con una gran categoría el serbio movió los hilos de su compañero, Viktor Troicky. Por el lado de la dupla argentina, buenos primeros servicios por parte de Chela. La estadística es contundente al respecto, la cual indica que tanto Mónaco como el oriundo de Ciudad Evita ganaron el 85% con esos golpes.
El primer set se definió por la vía del Tie Break, el primero en el fin de semana. Zimonjic con buen saque y Pico con una devolución exigida de globo que se iba le daba el primer punto del desempate a los serbios y después, con el saque de Chela y un retorno paralelo de Troicky le daba a los serbios el primer mini quiebre del match. Error no forzado sucesivo del flaco daba un 3-0 de ventaja para los locales. Devolución larga del número 16 del mundo y 3-1 y recuperación del servicio. Luego todo fue muy equitativo y los argentinos muy cerca de la red daban esperanza para adjudicarse el primer parcial y alimentar la esperanza visitante de estar un paso adelante en el sueño finalista. Chela sacaba 4-5 y una gran definición de Troicky pegado a la red los dejaba set point a los dueños de casa y posteriormente el mismo jugador le dio el primer parcial a Serbia. 7-6 y 7-4 en el desempate. Un dato estadístico: Chela perdió todos sus juegos de servicio. Poco común.
En el segundo parcial comenzó sacando Pico, algo que no había sucedido en el set inicial. Quizás por una cuestión de confianza o por estrategia. Hasta el momento Mónaco desempeñaba una gran performance. Cuando la contienda parecía complicarse en el 1-1 y ventaja para quiebre serbio, dos buenos saques de Chela mantuvieron con vida a los argentinos en el game y con algo de fortuna y errores típicos del doblista al que se lo exige como singlista como a Zimonjic, la Argentina mantiene su servicio a manos del Flaco y la cosa se ponía 2-1.
Chela había bajado mucho su rendimiento al momento de servir pero intentaba volver de a poco. En el 2-1 sacaba Nenad Zimonjic con la obligación de mantener su saque pero no cumple y Argentina quiebra por primera vez el servicio (fuera del tie break, por supuesto) y se colocaban 3-1. El de Ciudad Evita aplaudía la recuperación de su hijo deportivo predilecto. Cuando la dupla visitante se encontraba 4-2, un quiebre inesperado por parte de Serbia encendió la luz de alarma para los dirigidos por Tito Vázquez. Otra rotura del servicio de Chela y Serbia sacaba para el segundo set. Nada cambio en la situación local. Segundo parcial y 6-4.
Hasta el momento las chances argentinas de conseguir el pase a la final el sábado se veían absolutamente nulas. El bajón de los muchachos se vio, claramente, cuando perdieron ese segundo set después de no capitalizar un 4-1 a favor.
La tercera manga no escapó al común denominador que se venía ofreciendo durante el match. Zimonjic y Troicky entendieron a la perfección que esta jornada era clave y decisiva e hicieron gala de su convencimiento. Fue finalmente 7-6 (4); 6-4 y 6-2 el resultado final para que Argentina siga en la cima de esta serie pero con un peso más sobre sus hombros.
Serbia descuenta 1-2 y, por supuesto, se abren y continúan las incógnitas sobre el físico de Djokovic y también el de Tipsarevic, quien termino el encuentro con Del Potro con fuertes dolores en su tobillo.
De todo estar bien, la jornada del domingo llevará a la afición tenística un gran desayuno en bandeja y bata puesta. En el cuarto punto se encontrarían Juan Martin Del Potro y el nº 1 del mundo, Novak Djokovic en lo que se asemejaría a una final de Grand Slam o Masters 1000. Luego, David tendría la chance, si se cumple la lógica papelera, de ser nuevamente quien se calce el traje de héroe en una serie de Copa Davis.
En el caso de no estar bien el líder serbio, quien jugará con Del Potro será Viktor Troicky (no puede jugar con David porque ya lo hizo el viernes). Pero para que no juegue Novak mañana tiene que nevar en Haití.