El equipo de Coria gano 3-o a Finlandia y sello su pase a las finales de Málaga en noviembre venidero. Canadá y Gran Bretaña definen el otro cupo del grupo D.
La dulce espera ha terminado: Argentina vuelve a la élite del tenis luego de cinco años: apenas la última bola se fue ancha en el dobles, sobre la carpeta verde de madera del AO Arena se armó una fiesta celeste y blanca con todo el equipo bailando en ronda para celebrar el 3-0 ante Finlandia y el pase al Final 8 de la Copa Davis en Málaga, adonde los sudamericanos no accedían desde 2019.
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En la foto final con el cartel de ‘Málaga Final 8’ no faltó nadie: jugadores, cuerpo técnico, asistentes y dirigentes agitaron las banderas y camisetas argentinas y, detrás en la tribuna, el puñado de argentinos que alentaron durante toda la semana ‘futbolizaron’ la esperada celebración en Manchester.
“Estoy muy contento, sobre todo por los jugadores”, dijo Coria en la conferencia de prensa victoriosa en la noche del sábado. “Nos vamos del estadio como prometimos, con la frente en alto pero esta vez no es casualidad (ganar), estos chicos se rompieron el alma. Todo mérito también del cuerpo técnico, somos un equipo gigante.”
“El objetivo de todos era ir a Málaga. Después de la primera serie con Canadá hicimos lo que había que hacer y ahora solo hay que celebrar”, complementó a su lado Cerúndolo. “Fue una gran semana, después de Canadá tuvimos dos muy buenos partidos. Estuvimos muy unidos en general, y en la cancha es más fácil jugar así.”
De cierta forma, en un Grupo D tan competitivo con Canadá, Gran Bretaña y Finlandia, la clasificación argentina fue un triunfo sensacional. Porque los tiempos han cambiado para el tenis argentino; sin las figuras de Juan Martín del Potro, David Nalbandian y compañía… aquí en Manchester pareció el surgimiento de una nueva ‘legión’… la de los ‘Halcones’, liderada por Francisco Cerúndolo y Tomás Etcheverry (y Sebastián Báez), bien complementada por la sólida dupla de Machi González y Andrés Molteni, capitaneados por Guillermo Coria y un nutrido cuerpo técnico.
“En Argentina se vive con mucha pasión y la gente lo siente mucho y son muy ‘exitista’ porque hay muy buenos deportistas en el país, quizás nos mal acostumbramos a que nos vaya muy bien en todos los deportes… Entonces esto es un premio para todos nosotros”, dijo Cerúndolo.
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Claro que no fue fácil la clasificación: a ambos singlistas les costó encontrarle la vuelta a sus partidos este sábado. Jugaron tensos, quizás por la presión entendible de tener al alcance de la mano el Final 8 de Málaga ante rivales, en la previa, inferiores. Tanto Etcheverry como Cerúndolo arrancaron incómodos: el número dos llegó a estar 4-1 abajo, luego ganó un tie-break clave para encaminar en el segundo set su partido ante Vasa. Cerúndolo, en tanto, cedió su primer parcial ante Virtanen en tie-break (7-4) y luego se sacó la bronca con un 61 60 para darle el 2-0 a la Argentina.
A esa altura, ya entrada la noche en Manchester, solo restaba el triunfo en el dobles para poder reservar los pasajes a Málaga el 19 de noviembre: pese a ceder el set inicial, Machi González y Andrés Molteni se soltaron y vencieron a Heliovaara y Kaukovalta 76 (3) 64 63 luego de 2h 08m para sacar los tickets a Málaga, la sede que acogerá a las ocho mejores naciones del tenis mundial… un lugar que, nuevamente, le pertenece a la Argentina.
Nacen ‘Los Halcones’ del tenis
En las victorias, los argentinos estrenaron apodo y celebración en Manchester. ¿Cómo nació el nombre de ‘Los Halcones’?
“Después de perder con Canadá hacíamos los masajes en el hotel en la habitación y Wally (Walter Alfonso), el masajista, tira la idea de que tenemos que llamarnos de alguna manera. A él se le ocurrió lo de Halcones… leímos lo que significaba: victorioso y noble, con mucha autoridad, entonces dijimos vamos a llamarnos así. Como la selección de rugby se llaman los Pumas, las Leonas (de hockey) y bueno… Nosotros, los Halcones. Hicimos el festejo y nos gustó”, contó Etcheverry.