Tsisipas fue quien mando en la definición ante Rublev y en sets corridos, y abren la puerta para la nueva camada de recambio en el circuito.
Estan avisando. Ya no son una amenaza, un peligro, son realidad. Los Tsisipas, Rublev, Medvedev, Zverev, Thiem, vienen por todo al asalto del Big-3 y en Montecarlo, se “ocuparon” de Nole y Rafa. Son tiempos de recambio, y la nueva generación, esta haciendo ruido.
La crónica fría indica que el griego Stefanos Tsitsipas, 5º ATP, ganó este domingo su primer torneo de la categoría Masters 1000 tras derrotar en la final al ruso Andréi Rublev (8º), por 6-3, 6-3, en 1 hora y 11 minutos.
“Estoy desbordado por la emoción. Es, hasta el momento, la victoria más linda de mi vida“, declaró el tenista de 22 años, tras haberse arrodillado sobre la pista de polvo de ladrillo en la que Rafael Nadal se consagró nada menos que 11 veces.
“Sabía que era un rival duro y empecé el partido con nervios“, añadió el jugador griego, que destacó los numerosos enfrentamientos previos con Rublev. Ambos finalistas se vieron las caras por séptima vez, en un duelo en el que Tsitsipas ahora domina por la mínima: 4-3.
“Estoy orgulloso por cómo me he comportado sobre la pista“, añadió. La tercera fue la vencida para Tsitsipas, que se había quedado en las puertas del éxito en Toronto 2018 y en Madrid un año después, las otras dos finales de M1000 que disputó y que perdió ante Rafael Nadal y Novak Djokovic, respectivamente.
Poco inspirado al comienzo del partido, Rublev, cedió un break en el segundo juego y cuando quiso reequilibrar el resultado, el mal ya estaba hecho: Tsitsipas defendió tranquilamente sus saques para conseguir el primer set en 32 minutos.
El segundo set arrancó con el mismo tono: Tsitsipas le ganó el servicio al ruso para ponerse 2-1, y cerró con un break el último juego. Había hecho el daño mínimo pero necesario para asegurar un triunfo merecido y que invita a soñar por mas en la temporada
El griego no desaprovechó ninguna de las bolas de break de las que gozó y nunca sufrió en su saque. Rublev, que disputaba su primera final de M1000 tras eliminar a Nadal en cuartos, no gozó de ninguna chance de quiebre en todo el partido, lo que habla de la solidez del campeón.
Con el de hoy, Tsitsipas suma seis títulos de la ATP. Ya tenía el Masters de final de año de 2019 y cuatro torneos ATP 250 (Estocolmo, 2018; Marsella y Estoril, 2019; Marsella, 2020). Y este título tiene una curiosidad: en 1981 Julia Salnikova, la mamá del griego, ganó el certamen en la categoría junior.
Y frustró a Rublev, probablemente el jugador más destacado del último año y medio pero que no pudo conseguir un éxito en un evento similar.
Pero ya el llamado de atención dejo de ser tal, y para Djokovic, Nadal y Federer, a su regreso, saben que los tiempos estan cambiando y sus vigencias, estan próximas a vencer.