Después del mal tiempo, el jueves mejoró el panorama en Nueva York. Pero no fue así para Juan Martín Del Potro, 7º favorito y 8º en el ránking mundial, quien volvió a jugar sin tener descanso y perdió con el serbio Novak Djokovic, Nº 2 del mundo y defensor de la corona, en los cuartos de final del US Open. Con esta derrota del argentino, ya no quedan latinoamericanos en el último Grand Slam de 2012.
Del Potro, que ganó este Abierto en 2009, llegó por tercera vez a los cuartos de final en dicho certamen y esta vez cayó con Djokovic por 6-2, 7-6 (3) y 6-4 en el cierre de la undécima jornada en Flushing Meadows.
El duro pegador argentino no empezó bien y sufrió una derrota clara en el set inicial ante un Djokovic sólido, firme y con gran convicción, que llegó por 14ª vez consecutiva a los cuartos de final en los Grand Slam y la 21ª desde 2007.
El segundo capítulo fue muy diferente. Del Potro arrancó quebrándole el saque al serbio, parecía que iba a adueñarse del set, pero cedió su propio servicio y finalmente desembocaron en el tie-break, con el público de pie, aplaudiendo y agradeciendo por el espectáculo brindado.
Ya por entonces jugaban con un nivel tremendo, Del Potro tirando y arriesgando al límite, pero chocándose con un Djokovic muy resistente, con una defensa bárbara, corriendo y aguantando como en sus mejores días. No pudo prevalecer el argentino y, entre algunos errores suyos por tener que jugársela más de la cuenta, y algunos disparos precisos y veloces del europeo, el defensor del título marcó una ventaja de 2-0 en sets.
Sin dudas, se trató, como era previsible, de un golpe anímico importante: para Djokovic para creérsela más y sumar confianza y para Del Potro para sufrir un rompimiento de saque justo en el inicio del siguiente parcial.
Pudo Djokovic mantener la distancia en el marcador, siendo veloz, moviéndose con gran soltura y tratando de no ceder y ser presa del ritmo imponente que suele establecer Del Potro gracias a su potencia desde la base. Así, el serbio supo cerrar el duelo sin inconvenientes y festejó con mucha alegría.
Con esta derrota, Del Potro sigue sin poder arribar a las semifinales en un certamen de Grand Slam desde que ganó justamente su único ‘Major’, en el US Open ’09. Este año, hizo cuartos en Australia, Roland Garros y en este torneo, mientras que se despidió en octavos en Wimbledon.
Así, con este triunfo trabajado, exigente, pese a que supo resolverlo con autoridad en sets corridos, el serbio, ex Nº 1 del ránking de la ATP, forma parte nuevamente del grupo de los cuatro mejores, de las semifinales pactadas para el próximo sábado en el cemento de Nueva York.
Ese día, Djokovic jugará en semi contra el español David Ferrer, cuarto preclasificado, quien derrotó en un gran choque al serbio Janko Tipsarevic (8º) por 6-3, 6-7 (5), 2-6, 6-3 y 7-6 (4), luego de cuatro horas y 31 minutos de juego.
Para Djokovic es la posibilidad de dar otro paso adelante en busca de la cuarta final en el Abierto de Estados Unidos y la tercera seguida. El balcánico, dueño de cinco coronas de Grand Slam en su carrera, sólo pudo conquistar Nueva York en 2011.
Además, gracias a esta victoria el serbio alcanzó la cifra de 10 accesos consecutivos por lo menos a las semifinales en los Grand Slam, desde Wimbledon 2010. En este período, obtuvo cuatro de los grandes torneos y tres los consiguió el año último.