Se sacó las ganas, aunque haya tenido que esperar mas de cuatro años desde su ultimo GS, el Open de Australia ’08. Sufrió con su hombro que casi la deja fuera del circuito. Hoy, se sacó el peso de su mochila y a "puro grito" saboreó las mieles del exito en la ciudad luz.
La rusa María Sharapova derrotó por 6-3 y 6-2 a la italiana Sara Errani y obtuvo su primer título en Roland Garros, para de esa forma completar el Gran Slam de carrera, ya que era el único torneo grande que le faltaba.
Sharapova, número uno del mundo a partir del próximo lunes, salió a atacar con todo desde el primer minuto y le sacó ventajas a la italiana, que empezó el partido algo fría y nerviosa.
La siberiana destrozó el sueño de la discípula del español Pablo Lozano en 89 minutos, y a la tercera ocasión. La italiana, que salió al partido con unas tiras de protección en el muslo derecho, perdió su saque en cinco ocasiones, y dió lo mejor de sí misma al final, cuando salvó dos puntos de partido, uno de ellos con una soberbia dejada.
Aunque remontó un 4-0 inicial, y salvó dos bolas de set en el primer parcial, Errani no pudo impedir que Maria se lo llevase a la tercera oportunidad en 36 minutos.
En el segundo Maria rompió de inicio y Errani comprendió que no le quedaba más remedio que variar su juego, y subir de cuando en cuando a la red, para intentar lo que parecía imposible, pero su servicio no estuvo a la altura y cedía ante los potentes derechazos de la rusa.
Sharapova se convierte así en la tercera rusa en ganar en París después de Anastasia Myskina en 2004 y Svetlana Kuznetsova en 2009.
Además, Roland Garros es el título 27° de Sharapova, el tercero este año después de los de Stuttgart y Roma. También vuelve este lunes, oficialmente, al puesto de número uno del mundo, después de cuatro años.
El de este sábado ha sido su cuarto título del Grand Slam (Wimbledon 2004, US Open 2006 y Abierto de Australia 2008), con lo que completa la corona, en un poker de Majors para ella, convirtiéndose en la sexta jugadora que lo logra en la Era Abierta.
El informe de ESPN