Juan Martín Del Potro se clasificó para disputar los octavos de final del torneo de Miami, segundo Master 1000 de la temporada, tras vencer en tercera ronda al sueco Robin Soderling.
Del Potro disputó un partido más fácil de lo esperado ante el cuarto cabeza de serie, que se vio eliminado del torneo por un contundente 6-3 y 6-2 en solo una hora y 16 minutos de partido. Fue tan contundente lo del argentino, que Soderling no tuvo alternativas en todo el match de pelearle de igual a igual.
Luego de tres oportunidades perdidas ante otros top-10, como Verdasco, Roddick y Nadal, en ese orden, se sacó la espina ante Soderling hoy, y esta empezando a apretar a los peces gordos con lo hecho en esta tercera ronda.
El tandilense dominó el encuentro de principio a fin ante un Soderling desconocido que ofreció poca resistencia al dominio de Del Potro, que llegó a contar con hasta 11 oportunidades de romper el servicio de su rival por ninguna de éste.
Un primer set que empezó a puro galope y con tiros intensos. Pegando con mucha violencia, ambos trataban de tomar las riendas del partido desde el inicio, duelo en el que prevaleció Juan Martín. En el quinto game quebró al sueco, y conservó su ventaja, sin riesgos, ya que Soderling empezó a notar que no tenía la receta para vulnerar a Delpo.
El saque del helvético, no pesaba, y Delpo estaba intratable. Con mucha velocidad de piernas y decisión, en ningún momento dejó que el trámite decayera para él, y el sueco insistía sin aciertos en sus tiros, fuera de las lineas y varios que quedaban en la red. Esa fotografía la leyó perfectamente Juan Martín, entendió que el negocio era moverlo y cambiar efectos, ademas de su saque, que era un misil tras otro, incluso, metiendo aces en segundos servicios. Tras 51 minutos, el primer set estaba ya adentro del bolsillo, y la incognita estaba en ver como reaccionaba el sueco.
Y amagó, solo eso, con remontar la cosa. pero en eso se quedó. Del Potro logró otro quiebre para empezar 2-0 de arranque y el tobogán que encaminaba todo para el argentino. Soderling, ya estaba muy fastidiado, y solo quería que todo terminara rápido, ya que no tenía ni tenis, ni confianza, ni receta para afrontar lo que tenia del otro lado de la red. Llegaría otra ruptura y mas solidez en el juego de Juan Martín, que en ningún momento mostró molestias en su pierna derecha, protegida con un vendaje por su sobrecarga muscular.
La imagen de Del Potro, es la mejor de este 2011, casi un calco al del US Open ’09, por velocidad, derecha pesada, saque contundente, mente fría, y el plus adicional de superar a un top-10 tras tres caidas ante otros hasta Indian Wells. Y tuvo otra virtud, hizo fácil su match ante el sueco, cuando parecía al menos, complicado.
No en vano decíamos en la nota de la previa, que era el mejor top que le quedaba para medirse en este momento, con gran lucidez en su cabeza, y mucha, mucha confianza que se notó en cada movimiento dentro de la cancha.
Ahora, y por octavos, Juan Martín Del Potro se enfrentará el Martes con el estadounidense Mardy Fish, que en la tercera ronda eliminatoria venció al francés Richard Gasquet por 6-4 y 6-3.-