El suizo Roger Federer, n° 2 del tenis mundial, se refirió al abandono del argentino David Nalbandian durante el segundo partido en el Abierto de Australia.
"Había jugado también la semana anterior, así que creo que eso podría también tener que ver. Nunca tuvo realmente tiempo para descansar y adaptarse a todo", opinó.
El defensor del título alcanzó los octavos de final al ganarle con holgura y en 105 minutos al belga Xavier Malisse por 6-3, 6-3 y 6-1 en el primer Grand Slam del año, en Melbourne. Al tenista suizo lo espera ahora el español Tommy Robredo, ex top-ten mundial, quien se impuso al ucraniano Sergiy Stakhovsky por 5-7, 6-2, 6-4 y 6-2.
Nalbandian fue eliminado el jueves en segunda ronda al abandonar cuando perdía 6-1, 6-0 y 2-0 con el lituano Richard Berankis, de 20 años y 95° del ranking mundial. El argentino, 21° en la ATP, alegó sentirse sin fuerzas y mareado tras la batalla de casi cinco horas que ganó en la noche del martes ante el australiano Lleyton Hewitt.
"Tuvo casi el sorteo más duro que podía tenerse al tocarle Lleyton aquí", añadió Federer. "Obviamente la intensidad que recibes de Lleyton y los espectadores, y la presión, y todo eso combinado pueden quizás llevar a un resultado como este", agregó.
El suizo, el récordman mundial con 16 títulos de Grand Slam, cree que Nalbandian "tuvo que hacer un esfuerzo tremendo" para recuperarse de la desventaja de dos sets a uno y ganar el cuarto set ante Hewitt, el máximo ídolo australiano.
"Y entonces se mide a un rival duro en la siguiente ronda, y es en una cancha más pequeña, y las cosas no son lo mismo ni tan sencillas, así de simple. Y quizá tuvo algún contagio de algo que lo estaba afectando", concluyó Federer.
"Siempre pensé que no se puede ganar un Grand Slam en la primera semana, pero sí se puede perder. Tal vez eso es lo que sucedió con Nalbandian. Posiblemente, si hubiera tenido un sorteo más fácil a lo mejor habría sido una amenaza a largo plazo. Pero a partir de un partido duro en el principio del torneo, si no ganas el siguiente un poco más fácil, puede pasar esto. Al tramo final llegan los jugadores fuertes", argumentó el campeón.
Además, reconoció que el anterior duelo por la segunda ronda, ante el francés Gilles Simon, que se alargó a cinco sets, supuso una advertencia para los próximos compromisos.
"El partido contra Simon fue bueno pero éste también, lo único que en tres sets. Jugar otros cinco hoy hubiera sido demasiado. Pero los dos primeros parciales fueron más complicadas de lo que pueda parecer", indicó Federer. "Estoy contento de cómo responde mi cuerpo. Eso es clave para jugar al tenis actual. Eso es lo que tengo en este momento, así que estoy muy feliz", dijo el suizo.