Siete veteranos y una cara nueva disputarán a partir del domingo la Copa Masters de tenis, el gran certamen que cierra el telón de la temporada.
El español Rafael Nadal y el suizo Roger Federer, que en los últimos años se han disputado el primer puesto del escalafón mundial, son dos de los protagonistas regulares, al igual que otros cinco. Esta vez el único debutante en el torneo es el checo Tomas Berdych, finalista de Wimbledon.
Federer puso de manifiesto que cada vez resulta más difícil a los adolescentes llegar hasta el grupo de elite del tenis y por otra parte tampoco ve demasiados candidatos. "¿Jóvenes prometedores? No hay muchos, realmente", comentó el suizo. "Yo mismo me preguntaba por qué no tenemos ningún adolescente entre los cien primeros".
Eso solía ser bastante común en el deporte, aún entre los diez primeros. Pero esta vez, Andy Murray y Novak Djokovic son los dos más jóvenes clasificados para el certámen que presenta a los ocho mejores del circuito mundial con 23 años.
Berdych debuta en el grupo de elite a los 25 años, mientras Federer, que disputará el certámen por novena vez consecutiva, es el de mayor edad con 29. Andy Roddick y David Ferrer tienen 28, Robin Soderling 26 y el actual número uno, Rafael Nadal, clasificado por sexto año consecutivo, tiene 24.
"Lo encuentro sorprendente porque cuando yo estaba ascendiendo estaban Lleyton Hewitt, Marat Safin, Roddick, Ferrero y Tommy Haas; todos eran excelentes jugadores y estaban entre los cien primeros de adolescentes", agregó Federer. "Pero el juego se ha tornado más físico y mental y por eso quizás los jugadores de hoy necesitan más tiempo para avanzar".
Por cierto, muchos tenistas parecen alcanzar su potencial al promediar unos 25 años. Berdych tuvo su gran momento cuando eliminó a Federer en cuartos de final de Wimbledon este año antes de perder con Nadal su primera final de Grand Slam.
Soderling causó una impresión similar al derrotar a Nadal en el abierto francés del 2009 antes de caer frente a Federer en la final. Tuvo la experiencia opuesta este año, ganándole a Federer en cuartos de final para perder con Nadal en la final.
A Roddick no le sorprende que los tenistas tarden más en llegar. "No, si se observa el modo en que ha cambiado el juego y las exigencias físicas que demanda", comentó el estadounidense. "Peso de 20 a 25 libras (9 a 11 kilogramos) más de lo que pesaba cuando empecé. Pero el juego no era tan físicamente exigente, y las condiciones eran un poquito más rápidas".
"Pienso que debía depender menos del organismo cuando estaba ascendiendo", agregó. "Por eso creo que es difícil pedir a un muchacho de 17, 18 años, que lo haga durante 40 semanas por año. Creo que es el principal ejemplo del cambio en el tenis".
Eso explica por qué los clasificados para el gran certamen son los mismos. Seis de los clasificados para este año estuvieron el año pasado, aunque Roddick no jugó por estar lesionado.
"Es difícil; no muchos jugadores han podido progresar como para llegar por primera vez", dijo Murray. "Demuestra que has tenido un buen año".
El campeón del año pasado, Nikolay Davydenko, no se clasificó este año debido a que una serie de lesiones lo hicieron caer al puesto 22 en el escalafón. El subcampeón del 2009, el argentino Juan Martín Del Potro, fue operado en una muñeca, se perdió buena parte del año y tampoco está.
El torneo comenzará con una etapa de grupos, lo que significa que todos tienen garantizados tres partidos. Murray juega con Soderling en el primer encuentro del domingo y después Federer enfrenta a Ferrer. El otro grupo comienza a jugar el lunes.
Federer busca su quinto título en la Copa y espera hacer buen papel.
"Me siento como que me quedara todavía un torneo", dijo el suizo. "Mi organismo todavía no está implorando por vacaciones. Este es un gran certamen para mí. Es el objetivo de toda la temporada tratar de estar aquí. Y una vez que uno lo logra, trata de vencer a los compañeros entre los diez primeros del escalafón, lo que resulta divertido. Y uno espera guardar lo mejor para el final".