Ya mas distendidos todos, sin nervios innecesarios, y por el estricto honor deportivo, Eduardo Schwank y Horacio Zeballos completan la serie ante Francia en Lyon.
En el caso de el rosarino, reemplaza a Mónaco, midiéndose ante Simón, que hace lo propio suplantando a Monfils. Mas tarde Horacio juega por Nalbandian el choque que debía tener con Llodrá, sustituido por Arnaud Clement.
Argentina busca al menos, no terminar como España en cuartos, no entregar los dos puntos que quedan de la serie. Para eso, Schwank, con record 0-2 en singles de la Davis (perdió ante Soderling en Estocolmo y Davydenko en Moscú) sale temprano ante Simon, un jugador que en los papeles tendría que ganarle con cierta comodidad, pero el sabor amargo de ayer quizás, sea el suficiente disparador para Eduardo que pugne por ganar un partido importante e interesante para él, aunque no modifique el resultado de la llave. En la serie entre ellos, una victoria en 2008 en Viena para el argentino es el único antecedednte de ambos.
Por el lado de Zeballos, será la primera vez que juegue ante Clement, y le viene bien para ponerse a punto en esta superficie, ya que juega en
Metz dentro de unos días, y seguramente y al igual que Schwank, querra descargar mucha bronca por la actuación de ayer.