Un viernes de gloria, de enormes actuaciones, y con claras señales de que se puede dar la sorpresa y soñar nuevamente con una final de Copa Davis.
Argentina de la mano de Juan Martín Del Potro y Guido Pella pusieron el 2-0 lapidario casi ante Gran Bretaña, actual campéon, venciendo a Andy Murray y Kyle Edmund respectivamente, subrayando el gran acierto de Daniel Orsanic en elegir a ambos como singlistas de la primera jornada.
Con un temple único y nervios para la ocasión, Del Potro supo como doblegar a Andy Murray, el n° 2 ATP, el mismo que lo venció en Rio 2016, y que sucumbió tras 19 partidos invictos en Copa Davis. Fue por 6-4, 5-7, 6-7 (5), 6-3 y 6-4 en maratónicas cinco horas y siete minutos.
Un gran inicio para JM, dando señales que estaba afinado para la cita, que mostró a Murray de mayor a menor en el set inicial. Por eso, el 6-4 ajustado, era justicia en el trámite hasta allí. Pero como todos imaginaban, el match iba a ser largo y con emociones. Y no defraudaron.
Murray, hizo una exhibición de su defensa, con globos magistrales, entre su amplio repertorio. Se reacomodó en el segundo y supo como torcer la telaraña de Delpo, que bajó su nivel y no tuvo respuestas a algunos tiros rasantes del local, que lo forzaba a pegar a la carrera incomodándolo. Su premio, el 7-5 que igualaba la lucha.
Con Murray agrandado, Delpo tuvo que tener mas control de la pelota y no le dio tregua al escoces llegando a estar 5-4 y sirviendo para set, cosa que no pudo coseguir. Peor aun, el escoces lo quebró, lo estiró al tie break y se llevó el parcial por 7-5 (5) y se ponia delante en el marcador.
Pero en el cuarto, en solo 40 minutos y con dos quiebres, empezó a martillar con su drive y hasta con el reves, por donde siempre lo buscaba Murray. Paciente y sin ceder la iniciativa, se adueñaba del parcial por 6-3 y estiraba al quinto la definición.
Allí el tandilense se hizo valer de un gran servicio, y además quebró en el momento justo. En el séptimo game, después de un drive paralelo, se adelantó 4-3. Luego, en otra muestra de carácter, mantuvo su saque y no dejo peligrar mas su victoria, obtenida con un estupendo ace que marcó el delirio de todos los argentinos en el Emirates Arena.
"Terminé tarde el US Open y la poca energía que tenía la puse para este partido con Murray. Había que poner todo este viernes para el primer encuentro" señalaba Juan Martín.
"Fue impresionante esto para mí, me dolió haber perdido la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Río 2016, pero este partido será inolvidable por cómo se dio, tengo una gran felicidad. Jugar cinco horas y pico en un nivel altísimo ante el número dos del mundo no es fácil y por suerte pude ganar", añadió.