Tomas Berdych impresiona por su imponencia física. Es casi tan alto como Juan Martín del Potro, pero tiene una mayor contextura física. Por momentos, su andar es parecido al de Federer, pero se distingue por su cabellera rubia y sus ojos claros. De hecho, la línea de ropa deportiva que usa tiene un estilo similar al que utiliza el suizo multicampeón y la marca es idéntica para los tres.
De gesto serio dentro de la cancha se transforma en cortesía fuera. Ni español ni checo, pero Berdych acepta charlar en inglés. Sonríe. Es la imagen de frescura que se puede imaginar uno en un muchacho de 23 años, que luego se transformará para los partidos y que tiene una historia particular con la Argentina, donde jugó una de sus primeras series de Copa Davis con 19 años (la última en el Buenos Aires Lawn Tennis) y cuando ya se proyectaba como un gran talento en el circuito.
Hoy, 20° del ranking, recuerda aquellos días turbulentos, en los que se quejó del público local.
"Bueno, sí, es como una pequeña revancha, aunque nos enfrentamos todo el tiempo en el circuito y uno siempre tiene pequeñas revanchas. Y lo que me quedó de aquella vez en Argentina? Creo que fue una buena experiencia, porque era una de mis primeras series en la Davis, jugamos con uno de los mejores equipos del mundo de aquella época, con Guillermo Coria, David Nalbandian, Guillermo Cañas y era casi imposible ganar. Pero lo intentamos, tomamos la experiencia y ahora todo es diferente.
-Sí, como la superficie. ¿Qué tan buena es para ustedes?
-La superficie es nuestra ventaja. Sería lo mismo si fuéramos a la Argentina, nos pondrían polvo de ladrillo y la ventaja sería para ustedes. Es muy rápida y nos gusta jugar acá. Ganamos casi todos los partidos y eso es bueno.
-¿Se sienten favoritos?
-Es difícil decir quién es favorito. Tenemos un buen equipo, probablemente sea mejor, jugamos como locales, elegimos la superficie, pero del otro lado va a estar Juan Martín (Del Potro), que es el número 5 del mundo, tiene mucha experiencia, juega bien, ganó varios torneos, tuvo buenos resultados. Los otros también tienen experiencia en la Copa Davis, así que no pienso realmente que seamos los favoritos. Vamos a entrar en la cancha a tratar de ganar tres puntos, eso es todo.
-¿La experiencia no es justamente un punto a favor de ustedes?
-Bueno, puede ser, porque si miramos la serie que jugamos contra Francia, ellos tenían a Tsonga, Monfils, Simon, creo que los tres eran top ten o cerca y al final ganamos nosotros. Si le preguntabas a cualquiera, antes, te hubiera dicho que no teníamos posibilidades. El tenis es así y la experiencia nuestra en ese caso fue importante. Ahora veremos qué pasa el fin de semana.
-¿La presión será para ustedes o para la Argentina?
-Creo que habrá presión para los dos equipos.
-¿Cómo será el público?
-El público no es una presión para nosotros, sino que es nuestra ventaja también. La gente es un jugador más del equipo, nos va a ayudar mucho. Espero que vengan, que llenen el estadio y que el ambiente esté lindo.
-Jugarías con Mónaco. ¿Qué pensás de él?
–Es un buen jugador, llegó a ser número 15 del mundo, creo [14, en realidad], y hay que ser bueno para llegar hasta esa posición. Es un gran jugador, pero vamos a jugar en una superficie rápida, que no es su favorita. Por eso la superficie será nuestra ventaja.
-¿Cuál es la clave del partido?
–Ir despacio para llegar a ganar los tres puntos, pero nunca se sabe.