Hoy, la carta se llama David

Y… con la victoria de Leo, sin lugar a dudas, el panorama se ve diferente. El triunfo del correntino no solo iguala la serie en un punto por nación. Sino que realza, aún muchísimo más, la figura de David Nalbandian, quien podría convertirse, otra vez, en el icono cardinal de una serie más de Copa Davis.

No es novedad, ni tampoco noticia, lo que podamos decir del cordobés cuando le toca mezclar el celeste y blanco que tiene en la sangre. Todo lo que hizo, hace y, seguramente, hará por la Davis, lo hace por esa “corazonada” que mencionó minutos antes de subir al avión que lo depositaría en Frankfurt para después viajar a Estocolmo y darle una alegría a su capitán, Tito Vazquez. Sí, David viajó, aun sin estar cien por cien recuperado de su lesión, esa “intuición” como lo llamó en Ezeiza ante los periodistas, lo guió hacia la fría Suecia…

Después de que la serie quedara equiparada, decía, la imagen del Rey David, como lo apodaran los medios, nos lleva, indudablemente a ilusionarnos, a pensar que se puede, que tanto Suecia como nosotros, tenemos un lugar reservado en los cuartos de final. Habrá que ver quien confirma el vuelo…

El viaje de Nalbandian, ahora, tiene sentido, tiene lógica, y por sobre todas las cosas, hoy mas que nunca, tiene un concepto claro: El equipo tiene un líder. Y eso nunca debe pasar por inadvertido. Las palabras de David sobre sus compañeros seguramente tuvieron vida propia, nadie que compita a ese nivel y debute en una competencia como la Copa Davis y reciba un consejo o una palabra de aliento por parte de alguien que ha tenido que pelear “guerras” en los courts, puede dejar que esas frases hilvanadas en forma de escudos, pasen al olvido y no sacarle el jugo a la situación.

Nalbandian ha demostrado que su amor por la ensaladera de plata, por la representación argentina en el mundo deportivo, que su pasión, pueden mas que un dolor, que un alta médica, que un certificado. Hoy, no solo Suecia tiene un líder, nosotros también lo tenemos, nuestro líder no dejó sola a su escuadra, no dejó al General Vázquez en medio de las balas. La presencia del ex nº 3 del mundo ha energizado a toda la legión argentina en esta Davis, ha realizado una infusión de ánimo en el cuarteto nacional y en su cuerpo técnico. Desde ya este articulo quedará en la nada si hoy no se está a la altura de las circunstancias, pero, a priori, Nalbandian, hoy aparece como la gran carta que tiene este equipo que lidera Modesto Vazquez.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *