Día negro para los argentinos, excepto para el campeón defensor, Mariano Navone. Cayeron Coria, Delbonis y Bagnis en la jornada de cuartos. Mañana serán las semifinales.
Mariano Navone quedó como único representante argentino del AAT Challenger Santa Fe II y este viernes buscará el pase a la final en la ciudad donde se consagró campeón cuatro meses atrás, en la primera edición de este torneo organizado por la Asociación Argentina de Tenis.
El oriundo de 9 de Julio superó en cuartos al chileno Tomás Barrios Vera por 7-6 (2) y 6-4 y fue el único de los cuatro argentinos que logró avanzar a semifinales de este certamen de categoría 75 que cierra la temporada del ATP Challenger Tour en el país.
“Me potencia jugar acá, disfruto un montón. La primera vez que vine me recibieron muy bien, y tres meses después me recibieron mejor”, fueron las primeras palabras de un Navone eufórico, alentado por toda la hinchada.
La Nave, que ya está 139° en el ranking en vivo y ganó 13 de los últimos 14 partidos que disputó, analizó también el cambio que realizó en su juego desde que inició su relación con Andrés Dellatorre: “Empezamos a trabajar mucho más en el físico, cambiamos algunas cosas técnicas como ir a la bola, y también mentalmente, esto de empezar a creer que puedo ganar estos partidos. Y seguir, y seguir… me están convenciendo, me está yendo muy bien y espero que nunca se corte”.
La jornada comenzó con la eliminación del máximo favorito, [1] Federico Coria, quien se retiró cuando perdía por 6-0 y 3-2 frente al italiano Andrea Pellegrino (169°). El argentino se mostró desorientado y desentendido del encuentro, en contraste con la concentración del italiano, aunque no mostró falencias físicas. Fue la incomodidad psicológica del primer clasificado del Challenger lo que generó que no pudiera concretar un solo punto en el primer set.
En el segundo volvió a ceder su servicio, pero tuvo la facultad para recuperar ese break. Sin embargo, tras una nueva rotura de su rival, Coria anunció su retiro del encuentro, por lo que la clasificación fue para Pellegrino. El rosarino ya había sido recomendado por su preparador físico de no jugar el cotejo, pero al sentirse bien físicamente en la previa del mismo decidió intentarlo.
Luego del partido, el italiano comentó: “Me siento muy bien físicamente y estoy contento de estar acá jugando una semifinal. La clave de mi juego está en luchar todos los puntos partido a partido; ojalá pueda seguir así. La paso siempre muy bien acá, es uno de mis países favoritos después de Italia”. Pellegrino había estado en el país este año para la gira ATP-250 de Córdoba y Buenos Aires, de la que se fue sin victorias.
Su próximo rival será el checo [4] Vit Kopriva, cuarto preclasificado que este jueves superó sin discusiones a uno de los favoritos del público local: el campeón de Copa Davis Federico Delbonis, quien había recibido una invitación por parte de la organización. El resultado fue 6-4 y 6-3 en una hora y media de juego.
El encuentro comenzó con una temprana rotura del checo, que Federico remontó no sin dificultades. Tras ceder nuevamente el servicio entre ambos, Kopriva protagonizó un nuevo quiebre con el resultado 4-4 y pudo definir el primer set, ayudado por su velocidad en las devoluciones.
La segunda manga fue igual de pareja, y fue otro break del europeo el que hizo la diferencia para encontrar una buena ventaja sobre Delbonis, y llevarse el partido con el servicio ajeno para convertirse en el segundo semifinalista. Con este resultado, el Challenger de Santa Fé contará con un finalista del Viejo Continente.
Quien tampoco pudo avanzar entre los locales fue Facundo Bagnis, quien buscaba su victoria número 350 en el ATP Challenger Tour. El tenista de Armstrong cayó por 6-2 y 6-0 frente al brasileño Thiago Monteiro, uno de los jugadores más sólidos del torneo. Desde septiembre, el ex N° 61 del mundo (hoy está 126°) registra una marca de 13 victorias y 3 derrotas, con un título (Campinas) y una victoria ante top 10 (Holger Rune).
Monteiro mantuvo incómodo al argentino durante largos tramos del partido y aprovechó su potencia en las devoluciones para quebrar en dos instancias claves.
El carioca mostró la misma seguridad en el segundo set y no permitió un solo punto del rosarino, que se mostró fastidioso y errático hasta en las pelotas más accesibles. El desenlace fue una aplatastante derrota para el local, que dejó a un solo argentino vivo en la competencia.
“Perdí muchas semanas este año por distintos motivos, y con el apoyo del equipo y un trabajo serio creo que pude recuperar esa motivación. La parte mental es muy importante, empecé a trabajar más fuerte en ese sentido, a arreglar cosas que tenía, problemas con la familia, la salud. Pienso que tenemos una vida muy afortunada y ahí está la motivación”, se sinceró el brasileño de 29 años, entrenado desde hace cinco por el argentino Pablo Fuente.
Con información de Joaquín Johnston y AAT